El Domingo daba un paseo por el Rincón ,mi pueblo.Desde la casa de mis padres,en plena huerta,pasando por el núcleo del Rincón de Seca,(le llamamos el,de siempre,sobre todo los rinconeros).A lo que iba;de allí,ya salí hacia la orilla del río,y junto a éste llegué al puente de La Raya,y vuelta al Rincón.
Bien,en todo el tramo ,ya me quedó muy claro.Estamos en Otoño y ahora va notándonse.Ya el mes que viene,vendrá la siguiente estación,Invierno,y hasta aquí quería llegar.
Se huele el frío por la huerta,y entonces es cuándo se sabe fijo la época en la que estamos.Es ahora cuándo vas viendo por esos bancales los limones,naranjas,aún en árboles algunos,otros casi vacíos ya que se ha empezado hace poco su recogida.Es momento de ir viendo las hojas caídas de los pocos que por aquí las pierden,posándose en las zonas más húmedas .Es ahora cuándo en las viejas casas huertanas ves unas enormes manchas de humedad subiendo con ganas pared arriba.Ves los pájaros a montones cambiando su lugar habitual,hacia otros más templados y los ves pasar sobre el Segura,parándose en las motas ,éstas limpias en muchos tramos,en otras ,las máquinas encargadas allí esperando a que empiece la semana para seguir llevándose cañas y todo lo que sobre por la zona.
Es el momento de ,antes de ver,oler el humo de la lumbre.Antes y aún se mantiene en muchas de estas casas,antes decía,se encendía la lumbre,no las chimeneas cómo se dice ahora.Se encendía esa lumbre,en bajo,no esas cosas preparadas ahora para asar vituallas así a la altura de la cintura.No.Se traía la leña,a camiones,y antes, en isocarros,unos vehículos pequeños de carga,que ya no se ven.Se iba administrando para todo el invierno,y cogías varios trozos para preparar esa lumbre.Y ahí alrededor,a entrar en calor escapando de la humedad terrible de estas casas ;y sobre todo,se asaba de todo lo asable y que por aquí es mucho,especialmente lo procedente del gran rey de la casa huertana,el ,disculpen,marrano.Cerdo,esto no se decía ,era ese anterior el nombre,o,cochino,que también .Y de este animal,todo servía para preparar en la lumbre.Ahora,nada cómo la carne asada.Carne asá en la lumbre,un chatico de vino y pan,del bueno claro.Esto es lo que todo lo curaba,decía mi padre.Si no era ,o si era así en verdad,qué grandes ratos asando esa carne y,todo lo demás del ilustre,por cuánto nos daba,marranico.
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