jueves, 13 de septiembre de 2007

Langre

La mar en Langre

tranquilos en la arena

absoluta calma

mar y monte
Pincha sobre las imágenes, las verás mejor.
La sensación era de placer absoluto. La mar tranquila, con olas que rompían tranquilamente sobre la inmensa playa. Arena suave, sólo arena, sin una sola piedra ni siquiera pequeña, tan sólo restos de conchas , restos de algas y poco más . Con la marea baja, la playa ya era infinita; sol, agua, arena , y toda la calma del mundo. Lo normal en ese lugar era estar en total armonía con el lugar, tranquilo y salvaje. Baños eternos , relajados, sin ropa que impidiera disfrutar totalmente del lugar , de esa increíble sensación que suponía estar allí, y así. Un acceso difícil con una bajada entre piedras, descendiendo desde dónde dejábamos el coche, en prados llenos de hierba verde intenso, rodeados de maizales. Abajo, nos esperaba la absoluta maravilla de una playa increíble: Langre.

No hay comentarios: