Semana Santa está cerca. Ya la primavera se nota bastante , en la huerta; los naranjos y limoneros están en todo su esplendor , repletos de azahar, que se ve, y sobre todo se huele. Hay recuerdos unidos a muchas cosas, que se reavivan ocasionalmente. Un Jueves Santo, en mi pueblo, se me quedaron grabados los que , llegando estos dias, despiertan vivamente. Esa noche, la procesión es la del Silencio. Es sacada sólamente la imagen de Jesús en la Cruz , siendo llevado a hombros, cómo es costumbre en Murcia capital, y muchos de sus pueblos y, desde hace unos años, son los jóvenes del pueblo quienes se encargan de hacerlo y, con ropa de calle, sin vestir de nazarenos cómo en la otra procesión que se realiza en mi pueblo. Acompañan a la imagen las personas que así lo quieren, portando sólo una vela; de música, sólo un tambor, con un sonido suave, discreto; las luces del pueblo se apagan, todo el mundo va en silencio, y la imagen destaca con una ligera iluminación . En algunos tramos, la procesión sale de las calles del pequeño pueblo, pasando el camino por entre los huertos; silencio . El olor del azahar, de tantas flores de la huerta lo inunda todo, y se deja sentir con fuerza; silencio. Arriba, en el cielo lleno de estrellas, la luna llena brilla con fuerza, y sigue el silencio. Entre los acompañantes , mis padres y yo. Esa noche, fue muy especial ; el silencio apenas roto por los pasos de los que acompañabamos la imagen de Cristo, el leve golpeteo del tambor, el olor sobre todo del azahar, y la luna llena,toda esa combinación resultó tan mágica, que permanece fuertemente grabada en mí, y todos los años, en esta época, reaparece, pero, todo junto ya no podrá ser ; similar claro, pero no como esa noche, en la que aún tenía a mi padre , por suerte para mí, y pude compartir algo tan hermoso con él.
PUBLICADO POR LUZ DE GAS EN 20:25
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